Señor, Dios Todopoderoso, Omnipotente y Misericordioso; Padre, Hijo y Espíritu Santo, en el Nombre de Cristo te suplico que rompas todas las cadenas que demonios tengan sobre mí.
Padre, derrama la Inmaculada, Preciosísima y Redentora Sangre de Tu Hijo Jesucristo
Nuestro Señor sobre mí y quebranta toda atadura malvada que exista sobre mi cuerpo, mi mente o mi Alma.
Por la flagelación de Tu Amado Hijo Jesús, por Su Corona de Espinas, por Su Cruz, por Su Sangre y por Su Resurrección, te ruego, Oh Señor, que expulses de mí, toda influencia de Espíritus Malignos; que todo Espíritu Maligno al servicio de satanás salga de mí.
Por el Dios Verdadero, por el Dios Santo, por el Dios que todo lo puede, intercede por mí San Miguel Arcángel, te lo ruego… ven en mi ayuda y con Tu Divino Poder, da Tu orden imperiosa a todo demonio inmundo, que salga de mí para siempre; es con el Nombre de Jesús, mi Señor, Salvador y Redentor, y por la intercesión de nuestra madre la Santísima Virgen María, Madre de Dios que yo te lo suplico. Amén
Decir tres veces: San Miguel Arcángel con tus alas protégeme, con tu luz ilumíname con tu espada defiéndeme.
Es bueno invocar al Arcángel San Rafael y al Arcángel San Gabriel.
Se lo representa con el traje de Guerrero o de Soldado Centurión, y espada como Príncipe de Milicia Celestial que es.
Padre, derrama la Inmaculada, Preciosísima y Redentora Sangre de Tu Hijo Jesucristo
Nuestro Señor sobre mí y quebranta toda atadura malvada que exista sobre mi cuerpo, mi mente o mi Alma.
Por la flagelación de Tu Amado Hijo Jesús, por Su Corona de Espinas, por Su Cruz, por Su Sangre y por Su Resurrección, te ruego, Oh Señor, que expulses de mí, toda influencia de Espíritus Malignos; que todo Espíritu Maligno al servicio de satanás salga de mí.
Por el Dios Verdadero, por el Dios Santo, por el Dios que todo lo puede, intercede por mí San Miguel Arcángel, te lo ruego… ven en mi ayuda y con Tu Divino Poder, da Tu orden imperiosa a todo demonio inmundo, que salga de mí para siempre; es con el Nombre de Jesús, mi Señor, Salvador y Redentor, y por la intercesión de nuestra madre la Santísima Virgen María, Madre de Dios que yo te lo suplico. Amén
Decir tres veces: San Miguel Arcángel con tus alas protégeme, con tu luz ilumíname con tu espada defiéndeme.
Es bueno invocar al Arcángel San Rafael y al Arcángel San Gabriel.
Se lo representa con el traje de Guerrero o de Soldado Centurión, y espada como Príncipe de Milicia Celestial que es.
La oración a San Miguel del Papa León XIII
"Arcángel San Miguel, defiéndenos en la batalla. Sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás, Lucifer y a sus seguidores u otros espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén."